Hay todo tipo de marcas en un sendero que nos dan señales e indicaciones. Puede ser una pintada roja en una piedra, una cinta de color con el logo del Club Andino, o un machetazo rasgando la corteza de un árbol. Las pircas son una de estas señales: montículos formados por piedras apiladas que indican el camino correcto. Las que llevan una caña o palo (y soportan estoicas los vientos patagónicos) sirven para ser divisadas a la distancia e indicarnos en el horizonte por donde sigue el sendero. Son sinónimo de seguridad, de tranquilidad, de decir “vamos bien”. De invitarte a más.

Estas son las intenciones de este material. Es una propuesta, una sugerencia de y para caminantes que todas las temporadas, hacen una lista de recorridos (aunque sea mental) aún inconclusos, para atravesarlos cuando el clima lo permita y cuando la ansiedad por caminar ya no se controla.

Esta columna llamada Pirca es para ustedes. Para los amantes de la naturaleza de las zonas más agrestes de la región Andina. Para las que se animan a ir del otro lado de aquella montaña, y para quien la curiosidad les hormiguea tan fuerte que puede más que cualquier obstáculo que presente el sendero. Es también para aquellos que miraron, averiguan e indagan durante muchas temporadas, diferentes formas de acceder a un lugar y conseguir la logística necesaria. También es para vos que seguís soñando con hacer cumbre en tal cerro, vivaquear en aquel valle o hacer “de un tirón” una travesía por los filos. También es para la familia que quiere salir a caminar un rato del domingo y prefiere hacer recorridos poco frecuentes.

Para los que nos deleita recorrer los rincones de este paraíso a la sombra de los Andes y disfrutar de la naturaleza sin caminar en medio de un malón de personas este material puede ser útil.

Pirca es una guía de montaña que carga el sabor del descubrimiento con crónicas que rememoran y socializan senderos y picadas poco transitadas y conocidas de la región.

Son textos que describen las sensaciones que surgen al caminar en tiempo presente senderos de diferentes grados de exigencia y dificultad.

Son apuntes que cuentan historias que se viven en las alturas, que solo surgen en una travesía cuando se tiene la espalda cargada y los ojos llenos de paisajes.

Son fotos y dibujos que grafican momentos únicos, dejan testimonio de nuestras huellas e invitan a seguirlas.

También son extractos de entrevistas con caminantes, escaladores, guías, guardaparques, refugieros y gente de montaña que tuve el honor de entrevistar para diferentes medios en los últimos 15 años y que dejaron con sus palabras un legado y un conocimiento que se transmite de boca en boca y que perduran hasta hoy.

Novena entrega: Cerro Pantojo, el señor más alto de todos.

Desde la primera semana de mayo se abrieron las fronteras con el país trasandino y con esto se renovó la posibilidad de caminar en plena cordillera hasta llegar a este inconfundible peñón limítrofe, que nos aguarda ya colmado de nieve con las mejores panorámicas de la región. Si querés caminar…

Octava entrega: Refugio Colorado, puerta de entrada a lo desconocido

Si dudas que lo más complejo de llegar hasta el refugio Colorado es conseguir una embarcación que nos cruce desde Villa La Angostura (preferentemente desde bahía Brava, donde nace el istmo de Quetrihue) hasta la población Chabol, donde nace la senda, consolidada y bien marcada que nos lleva hasta el…

Séptima entrega: Cerro Ventana tan cerca, tan lejos

Una de las grandes injusticias a la hora de recomendar donde salir a caminar se reduce a este cerro ya que tiene muchas características a favor para ser más visitado que lo que es, pero por algún motivo no se lo tiene demasiado en cuenta a la hora de definir…

Sexta entrega: Cerro Vichadero/Mirador perfecto al Tronador

Debe ser uno de los destinos más inaccesibles del Parque Nacional, no solo por lo lejano sino por el difícil acceso para llegar a la cumbre de este cerro que tiene la mejor vista al Tronador, desde la cara menos visitada. Se recomienda coordinar esta salida cuando exista algún descuento…

Quinta entrega: Velco/ Refugio perdido del Alto Ñirihuau

Para quién suscribe es una de las salidas más atractivas de la región y sin embargo pasa desapercibida para muchos caminantes. Es recomendable porque tiene de todo. En este trayecto que te demorará no menos de 7 horas, vas a pasar por bosques enormes de lenga, miradores varios al Lago…

Cuarta entrega: Mallín de las nieblas

El nombre es de película, y no exagera ni un poquito. Es que los que vivimos a la sombra de la cordillera de los Andes, al menos en esta región patagónica, estamos mal acostumbrados (¿o será al revés?) a tener la posibilidad de remontar un río valle adentro y bajar…

Segunda entrega: Cuyin Manzano y Arroyo de los Quemados

Si el clima no acompaña en la capital de los lagos, salir de la ciudad rumbo a la estepa puede ser una solución. Una buena alternativa es llegar al poblado de Cuyin Manzano, ubicado a una docena de kilómetros (de ripio) de Confluencia. Desde allí, se pueden hacer varias caminatas,…

Primera entrega: Cerro Villegas “Zorro Estepario”

Caminar en la estepa permite elegir tu propio camino a cada paso y por momentos hace sentir que tus pisadas son las primeras humanas en medio de ese paisaje bien patagónico. La estepa habilita poder ver el horizonte, allá lejos, poder tomar noción de sus distancias, y poder entender que…