La Asociación de Revistas Culturales Independientes de Argentina (AreCIA) rechaza una vez más la brutal represión desatada por las fuerzas de seguridad contra la multitud que se manifestó en la Ciudad de Buenos Aires contra el ajuste a los jubilados y beneficiarios de las asignaciones sociales.
Foto: Nacho Sanchez- Citrica-Arecia
La masiva movilización que comenzó temprano en la mañana y continuó incluso con cacerolazos durante la madrugada *terminó con cientos de heridos y decenas de periodistas y comunicadores sociales lastimados a raíz de los gases, balas de goma y palazos. Juan Pablo Barrientos, fotógrafo de la Revista Cítrica, tuvo que soportar el impacto de veinte postas de goma en su cuerpo. Agustín Gulman, del portal Big Bang News, recibió cinco balazos a quemarropa. Suyai Serrano, trabajadora del archivo periodístico de la agencia Télam fue atropellada en la Avenida de Mayo cuando varias motos y un patrullero de la Policía Federal circularon a toda velocidad entre los manifestantes.
Cuatro reporteros gráficos de Página/12 también fueron heridos. Adrián Pérez recibió tres balazos de goma. Gonzalo Martínez, impactos en un brazo y su pierna. Bernardino Ávila sufrió un golpe en la cabeza por el que debieron suturarlo con cinco puntos. Y Leandro Teysseire, terminó con un profundo corte en la cara, luego de haber sido baleado en la movilización del jueves pasado.
A Lucas Molinari, integrante de Radio Gráfica, le pegaron un balazo de goma en un ojo. A Silvina Rouvier, camarógrafa de La García, la Policía le voló un diente de un perdigonazo. También fueron heridos Ignacio Petunchi (Ámbito Financiero), Sebastián Hacher (Cosecha Roja), Ayelén Rodríguez (Marcha Noticias), Bárbara Leiva (Notas), Julio Rodríguez (Radio 10) y Mariano Pacheco (La luna con gatillo / Resumen Latinoamericano).
Durante la jornada, en una cacería indiscriminada, los agentes de la Policía Federal y de la Ciudad de Buenos Aires detuvieron a cuatro trabajadores de prensa de FM La Patriada (Diego Murrone, Francisco Scarzella, Lorena Sfreir y Lula Lillo), un trabajador gráfico del Diario Popular (Gustavo Figueredo) y a referentes de organizaciones sindicales, cooperativas y sociales. Uno de ellos, Carlos Artacho, de Foetra Buenos Aires (sindicato de las Telecomunicaciones), estuvo casi cuatro horas sangrando, con la mandíbula rota, sin recibir atención médica.
AreCIA repudia la escalada de represión y criminalización de la protesta social por parte del Gobierno nacional y llama a un estado de alerta entre lxs trabajadorxs de prensa de todos los medios gráficos, radiales y televisivos.
Por Asociación de Revistas Culturales Independientes de Argentina
