(por la vaca.org) El grito fue global y fue en la calle.
Fue bandera, canto, pancarta y hojas escritas con la urgencia de la mano.
El grito que durante la semana supo ser hashtag y hoy fue cuerpo.
Fue brazos y pechos pintados.
Fue mujeres bailando.
Fue gargantas.
Fue pies que desde Plaza de Mayo hasta Congreso marcaron un ritmo. El ritmo que no tiene el Parlamento.
Ese grito fue al Estado.
Ese grito es por la ley.
lavaca decidió hacerlo cartel y así, el grito nos abrazó.
Sí.
Sí.
Sí.
Por mi nieta.
Por mis hijas.
Por nosotras.
Por todas.
Porque sea legal.
Porque tengamos suerte, chicas. Y que Dios las bendiga.
El grito, con la Campaña Nacional Por el Aborto Legal Seguro y Gratuito en la cabecera, entró a Plaza Congreso con la potencia de los cuerpos que se mueven juntos.
Entró corriendo.
Y gritando que acá estamos, para exigir salud pública, justicia social y soberanía en nuestros cuerpos.
Para exigir no más muertas, ni presas por abortos clandestinos.
Para que el Estado garantice el pleno acceso al derecho a la salud de las mujeres.
La calle gritó Aborto Legal Seguro y Gratuito.
Que se escuche.