Asociaciones civiles y organizaciones sociales alertan sobre el posible cierre de 40 casas de la Sedronar que se sumarían a las 39 ya clausuradas en agosto. Vientos de Libertad, Cáritas y Emaús, entre otras, realizaron un almuerzo abierto y pidieron la asistencia del gobierno de Weretilneck.

El Semillero es una de las seis casas de Atención y Acompañamiento Comunitario de que existen en Bariloche a donde asisten más de 120 personas.
Antes de que termine el mes el gobierno de Javier Milei podría cerrar unas 40 Casas de Atención y Acompañamiento Comunitario de la Sedronar, el organismo coordinador de políticas para las adicciones, que se sumarían a las 39 disueltas en agosto en todo el país. De confirmarse, quedarían abiertas poco más de 400. La advertencia viene de boca de Ana Carfagnini, trabajadora social del Centro Barrial El Semillero, una de las seis casas de este tipo que existen en Bariloche a donde asisten más de 120 personas.
Allí, en el barrio Nahuel Hué, las casas de atención realizaron este martes un guiso de lentejas para vecinos y periodistas, al que asistieron los coordinadores de estas asociaciones civiles, organizaciones sociales y ONG como el Hogar de Cristo de Cáritas (barrio Unión), Ni Un Pibe Menos por la Droga y Caviahue (barrio Arrayanes), Emaús (barrio La Alborada) y Vientos de Libertad, que además de El Semillero también direcciona otro centro barrial en Alún Ruca.
—Somos parte de la salud mental comunitaria, que es la atención del bienestar de las personas en el territorio, acompañando sus tareas cotidianas —dice Carfagnini.
Hay psicólogas, musicoterapeutas , trabajadoras sociales, vecinas y vecinos que organizan talleres deportivos, artísticos y de cocina. Acá, en El Semillero, por ejemplo, funciona una panadería y una carpintería.
El vínculo de la Sedronar y estas organizaciones es en efectivo. El organismo que depende del Ministerio de Salud baja fondos según la cantidad de asistentes, el equipo técnico, la carga horaria. Algunas casas, como el Hogar de Cristo y el Emaús, están habilitadas para pasar la noche. Asimismo, las organizaciones tienen que elevar informes personalizados todos los meses y reciben auditorías con frecuencia. Por eso llamó la atención entre ellas el argumento no oficial que esgrimió el gobierno cuando cerró sorpresivamente 39 casas el mes pasado, aunque lo veían venir.
La versión que circula en la mesa nacional de las organizaciones vinculadas a la Sedronar, es que desde presidencia bajó al Ministro de Salud Mario Lugones una orden que cayó como un pedazo de mampostería sobre el escritorio de Roberto Moro, Secretario de Políticas Integrales sobre Drogas de la Nación Argentina: achicar en un 30% el presupuesto de las Casas de Atención y Acompañamiento Comunitario de la Sedronar. Esta decisión se precipitó con el desempoderamiento de Moro tras la muerte del Papa Francisco.

Las casas de atención realizaron este martes un guiso de lentejas para vecinos y periodistas
El riesgo a un desordenamiento de la política social en la ciudad impulsó a las organizaciones y asociaciones a solicitar al gobernador Alberto Weretilneck algún tipo de asistencia:
“Esta situación aumenta exponencialmente los niveles de vulnerabilidad de las cientos de familias que transitan nuestros espacios, buscando un lugar de contención comunitaria. Asistimos a la población más afectada por el ajuste nacional”, explican en una carta que intentan hacerle llegar al mandatario.
“El trabajo que se realiza desde las Casas de Atención y acompañamiento es silencioso, cotidiano, invisibilizado pero los efectos de este trabajo se observan en todo el tejido social, y es así como se notarán las consecuencias de la falta de contención que nosotros armamos en las barriadas”, agregan y aportan un dato: hoy bajo la órbita de la SeNAF (Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia) no hay un solo joven en conflicto con la ley penal.
Carfagnini, de Vientos de Libertad, dice que algunas casas mantuvieron una reunión con Norma Mora, titular de Abordaje Integral de Consumos Problemáticos del Ministerio de Salud de la Provincia, un organismo que cuenta con unos 20 centros con tareas semejantes a los de Nación. Sin embargo, no hubo respuestas positivas al pedido de asistencia.
Por Pablo Bassi
Colectivo de Comunicación Popular Al Margen