En un contexto de avanzada sin pausa sobre las fuentes laborales y derechos fundamentales, los trabajadores y trabajadoras se convocan una vez más a la unidad en las calles. En Bariloche la concentración comenzará a las 10 de la mañana en el Centro Cívico. Informe sobre el impacto de los despidos en los organismos nacionales en nuestra ciudad.
La impresionante huelga iniciada aquel 1 de Mayo de 1886 en Chicago para exigir a los patrones que respetaran la jornada de ocho horas -que se había establecido por Ley pero era resistida por los empresarios- fue un reguero de pólvora que se extendió por distintas ciudades norteamericanas: más de 400.000 obreros pararon en 5.000 huelgas simultáneas.
La lucha, que venía sosteniéndose y creciendo a lo largo de muchos años antes, significó un antes y un después en la historia del movimiento obrero, que una vez más puso el cuerpo por una transformación social que todavía se plaga de deudas, pero que logró alzar la voz y cuestionar la explotación establecida tan naturalmente. La herencia es abono hasta nuestros días.
En aquellas manifestaciones, un grupo de sindicalistas anarquistas fueron acusados sin pruebas -y en un juicio plagado de irregularidades- de estallar una bomba contra las fuerzas policiales. No hubo miramientos y ocho de ellos fueron ejecutados. Más tarde, y en memoria de esta lucha, la Conferencia Internacional de Trabajadores reunida en París, declararía el 1 de Mayo como Día del Trabajador, que, con más lucha, hoy es el Día Internacional del Trabajador y la Trabajadora.
Tantísimas décadas después, el llamamiento a la unidad en defensa de los derechos laborales sigue siendo la clave: en el actual contexto de avanzada del modelo neoliberal, donde las estructuras del Estado son desguazadas en el marco de un feroz ajuste basado en despidos y el vaciamiento de organismos claves, el 1 de mayo vuelve a despertar con fuerza la necesidad de una salida conjunta. Lo muestra la historia: a los trabajadores y trabajadoras nadie les regaló nada. Las conquistas han sido siempre producto de la lucha de los miles que se organizaron.
Es por esto que en este día los trabajadores y trabajadoras del país dejan una vez más en evidencia la grave situación que atraviesan en todo el territorio. Así lo expresaba Lihuel Castillo, trabajador despedido de la Secretaria de Agricultura Familiar (SAF) con sede en Bariloche, como espejo de tantísimas otras situaciones que se atraviesan en estos días: “El panorama es de vaciamiento en todos los organismos nacionales. Entendemos que el proyecto político de la alianza cambiemos es el achicamiento del Estado con un objetivo claro que es la desregularización de la economía y la intensificación de políticas públicas que aporten a los negocios que están haciendo hoy quienes antes eran los CEOS de las empresas y hoy son gobierno en nuestro país. Por lo tanto, en este contexto, entendemos que la lucha no es solamente de los Trabajadores del Estado, sino del conjunto de la clase trabajadora, de organismo públicos, empresas, PyMES, trabajadores y trabajadoras de la economía popular”, detalla.
Vale la pena recordar que desde principios de abril de este año se viene intensificando el proceso de vaciamiento de este organismo en todo el país, no solo con desfinanciamiento de las líneas de trabajo que venían desarrollando técnicos en todo el territorio nacional sino ahora con la gravedad de despidos masivos: ya más de 120 en el trascurso de las últimas semanas, algunos con más de 20 años de experiencia.
“Todos los trabajadores nacionales trabajamos garantizando servicios a la sociedad”, señaló a su vez Pablo Losardo, referente del sector. “Creemos que el Estado debe funcionar y dar respuesta a todo lo que es desarrollo social, jubilaciones, pensiones. Tenemos 13 mil pequeños productores en la provincia con los cuales trabajamos y generamos alimentos sanos, y todo eso está en discusión a ver si tiene cabida en el modelo actual. Nuestro trabajo genera eso, entre otras cosas: alimentos sanos, permanencia de los campesinos en el campo, democratización del comercio, hemos laburado fuertemente el comercio directo, y todos esos trabajos invisibles son parte de lo que lo que hacemos. Y todo eso se cae en cuanto aportes del Estado”.
En este contexto se da también un proceso de vaciamiento en el SENASA, organismos de control sanitario de la producción animal y vegetal en todo el país, que atraviesa un proceso de tercerización de las funciones que venía realizando y donde ya circula una lista de más de 220 despidos para el trascurso de este mes.
La situación se repite como política en otros organismos, como el INTI, donde también los trabajadores denunciaron despidos y pérdida de funciones: el 26 de enero se registraron 254 despedidos en el marco de la reconfiguración de la institución elaborada por una consultora extranjera. Así también en el PAMI. “Estamos muy preocupados porque salió una resolución que es la 339 a nivel nacional que lo que dice es que a partir de ahora y por decisión del ministerio va a haber una atención única de todo lo que tiene que ver con lo social en el país”, explica Carolina Alac, delegada de ATE PAMI Bariloche. “Esto lo va a manejar supuestamente el ANSES y le sacaría tareas a PAMI, que atiene a más de 5 millones de afiliados”.
Los medios ya van preparando el terreno: la semana anterior el portal Infobae anunciaba que en PAMI sobran 4 mil empleados de la planta total, que es de 13.900. Sin embargo los trabajadores repiten hasta el cansancio: no sobran trabajadores, faltan políticas de Estado. “Estamos viviendo tiempos muy tristes, con familias completas que se quedan sin su sustento, que se enteran que son despedidos a través de listados, pero estamos también con una renovación de fuerzas porque vemos unidad en los sectores: la pata macrista nos está aplastando y es necesario juntarnos”.
Unidad en la acción
En este difícil contexto, el proceso de unidad en la acción viene creciendo y permitiendo instancias de coordinación en la lucha de las centrales obreras, sobre todo desde las bases que permiten un proceso de acumulación política que se une frente a los conflictos que estallan día tras día.
“Este 1 de mayo del 2018 es de mucha tristeza porque hay muchos compañeros y compañeras que se quedaron sin trabajo y que hoy no van a poder estar festejando en la calle con sus compañeros o en sus casas o descansando de su trabajo. El 1 de mayo históricamente en nuestro país ha sido un momento también de poder cristalizar la dignidad del trabajo, un momento de encuentro en la calle. En Argentina se ha podido resignificar el 1 de mayo como un momento de reconocimiento de la clase trabajadora en sus derechos laborales”, dice Castillo. “Hoy es un 1 de mayo que nos debe encontrar necesariamente en un hecho político de unidad y en la calle”, sintetiza.
En Bariloche la concentración comenzará a las 10 de la mañana en el Centro Cívico y desde las 11 se confluirá, en el marco de la organización intersindical, en una Charla Debate y posterior almuerzo en la sede local del sindicato docente Unter.
Por Violeta Moraga
Equipo de Comunicación Popular Colectivo al Margen