Viven en nuestro país espacios políticos, dirigentes y funcionarios consternados por quienes “tuvieron que caer” en él. En el polo opuesto, quienes dedican su labor cotidiana a que su esfuerzo y prestaciones alcancen niveles superlativos de eficiencia.
Hay quienes lo usan, quienes lo eligen y quienes tienen en él la única posibilidad de acceder a una vida mejor y más digna para sí o sus familias. Hablamos de Salud. Hablamos de Educación. Hablamos de Justicia. Hablamos de “El Estado”, pero fundamentalmente de los y las trabajadores que lo integran.
Año 2022: Nada nuevo bajo el sol. Arranque de ciclos legislativos en todos sus niveles y negociaciones paritarias que definirán los salarios en los meses siguientes para el sector público y servirá como marco referencial al ámbito privado. A diferencia de los últimos años, en Rio Negro marzo inicia con un paro de 48 Hs. que se inició ayer y movilizaciones en las principales ciudades resuelto por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y el sector docente nucleado en UnTER en rechazo a la propuesta de un incremento del 21 %, escalonado en próximos 6 meses y la amenaza del ministro de Gobierno provincial Rodrigo Buteler de descontar los días de paro. Por su parte, la Gobernadora Arabela Carreras en su discurso que inauguró el período parlamentario no se refirió al tema, pero manifestó que continúan las negociaciones para encontrar una solución al conflicto salarial y demás reclamos.
Hospitalarias Realidades
Quien haya vivido una intervención quirúrgica de complejidad puede que comprenda algunas de las alternativas que relataremos en este segmento de la crónica. En el caso de quien escribe, nunca había pasado siquiera por una internación. Ante este desafío -en mi caso programado y no debido a una urgencia- a medida que se acerca la fecha definida por los y las profesionales de la salud, se modificaron prioridades y anhelos.
Certeza, una: años de limitaciones a punto de desaparecer. Dudas, miles: ¿Cómo prepararme? ¿Qué tengo que hacer? ¿Cuándo? ¿Quién me asistirá en este proceso? Etcéteras, etcéteras y etcéteras…………
Y en el centro del transitar hacia el reemplazo de mi gastada cadera, el interrogante que atraviesa cada pequeño paso o situación a resolver y que se terminará develando tras el paso por el quirófano: ¿Cómo será volver a vivir un día despojado de dolor constante?
En Bariloche, a pesar del constante y desorganizado crecimiento demográfico y poblacional, el sistema de salud público continúa centralizado en salitas distribuidas en algunos barrios y en el Hospital Zonal Dr. Ramón Carrillo, inaugurado en 1938 y desde hace tiempo en proceso de ampliación y remodelación. Superando falencias edilicias y faltantes de recursos, TODO (y esto está bueno reiterarlo y seguramente es compartido por cualquiera que haya asistido a este centro de salud cabecera en la región que atiende tanto a residentes como a turistas) TODO el personal, tanto administrativo como médico y no médico, entregan mucho más de lo debido para brindar un servicio de excelencia.
Hasta aquí un relato que pivoteó entre el reconocimiento eterno a la tarea cotidiana de aquellos y aquellas profesionales a las que se los aplaude cuando las pandemias aprietan, pero también se los ningunea a la hora del incremento salarial y aquellas impresiones en primera persona que bien podrían destinarse a un diario íntimo o a cualquiera de los tantos soportes digitales a los que muchos y muchas accedemos en nuestra efímera y acotada escritura encapsulada en la virtualidad actual.
Ya en mi hogar, rememoro lo vivido durante varios días en la Sala de Cuidados Intermedios, lugar en el que, más allá de tratamientos y procesos de curación, el paciente es tratado al mismo tiempo de manera amorosa y profesional como un ser único, pero sin hacer diferencias del sector social, ámbito o institución del que provenga. Y esto, al ser un derecho humano y que debería ser algo obvio que ni debería mencionarse, en el mundo y sistema híper-individualista y capitalista en el que estamos inmersos, cuando ocurre debe destacarse.
Todo salió bien. Como resultado, un presente signado por un proceso posoperatorio encaminado al final feliz. Punto final del relato. Antes de cerrar este texto, me permito citar un tramo de un poema escrito y musicalizado por Joan Manuel Serrat: “…Detrás de los héroes y de los titanes, detrás de las gestas de la humanidad y de las medallas de los generales. Detrás de la Estatua de la Libertad, Detrás, está la gente”.
Por Fabián Agosta
Fotos: Euge Neme
Cooperativa de Comunicación Popular Al Margen
Seguí informándote en Al Margen: