Un antiguo exponente de la burocracia sindical peronista fue elegido intendente de San Carlos de Bariloche, el mayor distrito electoral de Río Negro. Walter Enrique Cortés, histórico secretario general de la seccional local de la Asociación Empleados de Comercio (AEC). Nota de Susana Lara.
Cortés logró aglutinar la representación electoral de centro-derecha, para lo que contó con el respaldo de un grupo de libertarios. Aunque la capital institucional es Viedma, es en las calles, rutas y lobby de hoteles de esta ciudad donde se expresan con mayor agudeza los conflictos por el derecho al territorio tradicional del pueblo mapuche-tehuelche, la apropiación de bienes de la naturaleza por parte del capital privado, la militarización de la vida cotidiana en democracia y la emergencia de la nueva derecha, entre otras tensiones. Así, el interés por la gobernabilidad de esta ciudad excede a la base social andina y al propio gobierno local.
El proceso de los partidos políticos a nivel nacional y las respuestas locales cuajaron un futuro intendente surgido del más bajo porcentaje de votos registrado en la historia institucional de la provincia, con un reparto de las once bancas del Concejo Deliberante local en seis bloques cuya integración definitiva la definirá la Justicia Electoral provincial. Arabela Carreras, actual gobernadora de Río Negro, perdió en su cuna política a pesar de contar con todo el aparato del Estado y aparecer como la llave local de los acuerdos económicos y financieros que se plasman en la provincia. Fue concejal de la alianza Frente para la Victoria – SUR. Ahora quedó sola con el sello de Juntos Somos Río Negro, ya que los aliados peronistas que respaldaron en abril la candidatura a gobernador de Alberto Weretilneck fueron con candidato propio y le restaron más del 10 % (alianza UNE). Ya dio señales de que se aliará a Cortés para el gobierno local.
Bariloche tiene una población estable de aproximadamente 150.000 habitantes, más del 20 % del total provincial. Así, llaman la atención los 108.000 empadronados en condiciones de votar en las últimas elecciones del 3 de setiembre pasado, en una ciudad con mucha población infantil. De todos modos, bajó la asistencia a las urnas y creció el voto en blanco, tanto respecto a otros comicios en esta misma ciudad como respecto a la media provincial. Menos del 9 % de la población impuso el gobierno para toda la ciudad.
El Partido Unión y Libertad (PUL), sello político que fundó Adolfo Rodríguez Saa para disputar las presidenciales desde San Luis, se revitalizó de la mano de Cortés que lo conduce en Bariloche desde hace ocho años.
Cuatro años
En sólo cuatro años emergió un nuevo escenario político partidario, que se expresó en los resultados de las elecciones que proclamaron a Gustavo Genusso (JSRN) para el período que finaliza el próximo 10 de diciembre y los de su sucesor Cortés. En 2019, se presentaron diez candidaturas a intendente y Genusso se impuso por casi el 33 % de los votos. Este año, hubo doce candidaturas y Cortés se impuso por poco más del 19 % de los votos.
El CD pasará de cinco a seis bloques, por lo que el futuro intendente estará obligado a negociar sin mayoría propia. De todos modos, puede conseguir un concejal más en el recuento definitivo que precisará la justicia. El PUL creció desde el 5,7 %, cuando logró un concejal, Gerardo Del Río, también dirigente del gremio mercantil, que ahora será presidente del cuerpo.
Juntos por el Cambio logró un 7,5 para su candidato a intendente, cuando en el departamento había logrado el 19 % en los comicios de abril. Bariloche era una plaza apetecida por el PRO, al punto de que Eugenio Burzaco se había instalado en el country Arelauquen con el tiempo suficiente para acumular años de residencia exigidos por ley para ser candidato. Ese proyecto quedó desplazado y regresó a la ciudad de Buenos Aires para asumir en la cartera de Seguridad, responsable institucional del crimen del militante Facundo Molares, durante una manifestación pública horas antes de las últimas PASO.
Primero, Río Negro, alianza afín a los libertarios, participó por primera vez con candidatos propios. En las PASO alcanzó el 11 % en Bariloche y ahora descendió al 6,5 %, asegurándose, de todos modos, un lugar en el CD, plataforma básica desde la que puede crecer. El espacio propio de La Libertad Avanza, el partido FE, se sumó a la alianza Sumamos por Bariloche, que encabezó el concejal Pablo Chamatrópulos, un ex funcionario de Genusso que alcanzó el 4 %. Otros libertarios se plegaron a la lista ganadora.
Es decir, las expresiones de derechas estuvieron en varias listas. Ni la presencia en los medios de comunicación hegemónicos ni la campaña antimapuche ganan elecciones; sí horadan la calidad institucional y la democracia del día a día.
Por otra parte, el Frente de Izquierda y de los Trabajadores sufrió un duro golpe. Hace cuatro años consiguió 4,5 % para intendente y ahora sólo 1,6 %. En el departamento Bariloche, en las PASO llegó al 4,9 % y 5,8 % en abril con su candidato a gobernador. Parte de ese caudal puede haberse ido a una propuesta vecinalista progresista. Las candidaturas del espacio de Claudio Lozano también cayeron respecto a abril y agosto. Parte de esas pérdidas pueden estar en el ausentismo, el crecimiento del voto en blanco que pasó del 9 % al 13 % en las elecciones de intendente.
Pasado & futuro
La gestión futura mostrará el perfil político que adopte Cortés para esta etapa. Su pasado aporta elementos sugerentes, pero no lo determinará mecánicamente, ya que ha mostrado gran capacidad de aggiornarse. Con su hermano menor, Nelson Daniel Cortés, participaron activamente dentro del peronismo, tanto en lo sindical como lo partidario, hasta ser expulsado del PJ. Usaron medios de comunicación social (radio, web y señal de TV) del sindicato de comercio en la acumulación de poder. Walter (60 años) durante nueve años condujo el programa Con voz y voto de la señal Alto Bariloche que se transmitió por aire y por cable. Lleva 30 al frente de la seccional de Empleados de Comercio.
En las elecciones del ‘99 accedió a una banca legislativa en la lista del Frente para el Cambio que integraron el PJ y el Movimiento Patagónico Popular (MPP), partido del que surgió Weretilneck.
Ambos militaron el PUL hace cuatro años, marcando el regreso abierto a la política de Walter después de pagar con cárcel su participación en la millonaria defraudación al policlínico Arbos realizada en 1999. Los hechos fueron probados, pero fue sobreseído por la Corte Suprema de Justicia por la mora en el proceso.
Su hermano fue concejal peronista en El Bolsón y pulseó por llegar a la intendencia de esa localidad. Después ingresó a la Legislatura como parte del Frente para la Victoria, del que se fue en 2007 para crear un bloque unipersonal, “Crecer con principios”. Ambos confrontaron con Weretilneck cuando el actual senador nacional se discutía como compañero de fórmula de Carlos “Gringo” Soria. El peronismo rionegrino para el 2011 los sancionó, cuando todavía lo integraba Miguel Pichetto, creando sus propios espacios como mesas políticas y mesas sindicales.
En 2019, Daniel fue candidato a legislador por el PUL en alianza con pastores de iglesias evangélicas, cuando esa estrategia todavía no se explicitaba abiertamente en las provincias. Daniel Herrera, pastor evangélico de Valle Medio, fue candidato y compartió tribuna con los Cortés.
La alianza local de gobierno y el vínculo con la administración provincial probablemente se defina con los resultados de las elecciones de octubre en la mano. De todos modos, algunos dirigentes picaron en punta para imponer sus nombres en el futuro gabinete de gobierno, donde algunas carteras son especialmente jugosas por las inversiones en infraestructura y vitrina internacional.
Por Susana Lara (El Cohete a la Luna)
Cooperativa de Comunicación Popular Al Margen
Seguí leyendo Al Margen:
