El miércoles 30 de marzo se llevó a cabo la audiencia -en forma remota- donde se decidió la prórroga de la prisión preventiva de Diego Ravasio y Martín Feilberg, acusados del crimen de Elías Garay.
En una primera instancia, la fiscalía argumentó que el peligro de fuga seguía vigente. Los imputados de homicidio e intento de homicidio podían destruir u ocultar pruebas como el arma letal que todavía no se pudo hallar. Además Diego Ravasio y Martín Feilberg ya habían huido antes. El día que dispararon a Elías Garay e hirieron a Gonzalo Cabrera -pudiendo haber bajado hacia El Bolsón y pedir ayuda- tomaron la ruta más larga, la que pasa por Maitén hacia Esquel, cambiando de provincia y de jurisdicción, decisión que agrava los hechos. La justicia los buscó durante cinco días. Primero se encontró a Ravasio. Y luego Feilberg se entregó en Comodoro Rivadavia. Los abogados querellantes Andrea Reile y Ezequiel Palavecino, pidieron extender el encarcelamiento de los imputados hasta el 26 de abril, fecha final para el acopio de pruebas.
En una segunda instancia, uno de los abogados defensores pidió prisión domiciliaria y el otro, la libertad de su defendido. Hasta el momento del crimen, los imputados trabajaban para la familia Rocco, que tiene una dudosa concesión de tierra fiscal para forestar pinos en la Cuesta del Ternero. El 18 de septiembre cuando la comunidad Quemquemtrew inició su proceso de reivindicación territorial, el empresario Rolando Rocco exigió un inmediato desalojo. El gobierno provincial, en lugar de facilitar una mesa de diálogo entre las partes, decidió criminalizar la recuperación territorial. Seis días después la policía sitió la zona en conflicto cerrando los accesos de comunicación. La comunidad quedó aislada. No se permitió a nadie subir a llevar comida o abrigo.
El 21 de noviembre de 2021, a primera hora de la tarde, los acusados lograron traspasar el cerco policial -aludiendo que eran dos cazadores que se habían perdido- e irrumpieron en el territorio. Descargaron una bala en la cabeza de Elías Garay -a menos de un metro de distancia- y otros dos tiros que lesionaron gravemente a Gonzalo Cabrera. Cuatro años antes, una escena con demasiados puntos en común: en la ruta 40, un chico que comenzó a apropiarse de su identidad Mapuche y a formar parte de su lucha histórica, que resistía en el monte. El 25 de noviembre del 2017 Rafael Nahuel era asesinado por la espalda por las fuerzas de seguridad.
El juez Gangarrosa rechazó los requerimientos de la defensa. Tanto Ravasio como Feilberg reconocieron -en la audiencia de formulación de cargos- haber ingresado al territorio de la lof Quemquemtrew, haber portado armas de fuego, haber disparado y haber huido. Los abogados defensores Estanislao Cazaux y Ernesto Saavedra impugnaron la decisión del magistrado y la sesión pasó a un cuarto intermedio.
Después de más de tres horas de audiencia, el juez resolvió que los imputados permanecerán un tiempo más dentro de la cárcel del penal 1 de Viedma, hasta que finalice la investigación.
Por Verónica Battaglia
Cooperativa de comunicación Popular Al Margen
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