El origen del conflicto bélico y su posible evolución, el impacto en nuestro país, el rol de las fakes news, la relación de Putin con su pueblo. De todo eso hablamos con Ignacio Wonsiak, geógrafo argentino especialista en Rusia.
Cuando este jueves amaneció en la Argentina, la Federación Rusa había iniciado ya un ataque sobre los establecimientos militares de Ucrania. La ofensiva era posibilidad inminente durante los últimos días. La guerra cambia el panorama político internacional y desde ahora, a cada minuto, todo puede pasar.
“Rusia le está disputando a Estados Unidos la supremacía militar y territorial en Europa”, afirma Ignacio Wonsiak, geógrafo argentino especialista en Rusia, que en diálogo con Al margen dio detalles clave sobre el conflicto para entender qué es lo que ocurre a 12.800 kilómetros de nuestro país.
– ¿Cuál son las claves para entender esta escalada bélica?
– En primer lugar, el golpe de Estado en 2014 en Ucrania, que condujo a la incorporación de Crimea a la Federación Rusa y al conflicto en la región del Donbass en el este de Ucrania en su frontera con Rusia, donde la mayor parte de la población es ruso parlante y busca su independencia de Ucrania. Rusia acusa a Ucrania de genocidio hacia la población de estas regiones.
Esto se explica, y es lo central, por la permanente expansión de la OTAN durante los últimos 25 años en Europa Central y Oriental, incorporando a los países del antiguo Pacto de Varsovia. Ucrania significa para Rusia el límite de la expansión de la OTAN sobre sus fronteras. La OTAN comenzó a armar a Ucrania y Rusia entiende esto como una provocación abierta y a partir de allí es que actúa.
Recordemos que Rusia exigió por escrito a la OTAN que retrotraiga su expansión en el Este a los límites de 1997 y se aferra al “Principio de indivisibilidad de la seguridad internacional”, según la cual ningún país puede reforzar su seguridad en detrimento de la otros.
Además, hay un aspecto también económico y geoestratégico: el gas que Rusia provee a Europa. Ya está terminado el gasoducto “Nordstream 2”, el cual ingresa a Alemania por el Mar Báltico y provocaría un golpe económico a Ucrania. De allí tantas sanciones económicas a este proyecto por parte de Estados Unidos, quienes están enviando gas licuado a Europa, cuyo precio es mayor que el del gas ruso.
Por último, con este conflicto, en términos geopolíticos, Rusia le está disputando a Estados Unidos la supremacía militar y territorial en Europa, lo cual es un dato no menor.
– ¿Cómo crees que evolucionará el conflicto?
– Es difícil prever ya que recién comienza, pero en un principio Rusia sostiene que invadir por tierra no es parte de sus planes y que las imágenes con ataques a poblaciones civiles son montajes de la inteligencia ucraniana. En pleno siglo XXI, el manejo de la información a través de redes sociales es muy relevante para influir en la opinión pública internacional. En este sentido, hay que estar muy atentos a las “fake news” y a las operaciones de desinformación.
En su anuncio, Putin define la operación como una defensa a las repúblicas de Donestk y Lugansk intentando reducir el potencial militar de Ucrania atacando depósitos de armamentos.
Por otra parte, Rusia aboga por un cambio de régimen en Kiev y por un nuevo gobierno, aunque sostiene que no invadirá. Por lo tanto, creo que el escenario aún está muy abierto, ya que tampoco la OTAN se definió aún (técnicamente no puede intervenir con tropas ya que Ucrania no es país miembro).
– Putin habla de neo nazismo en Ucrania. ¿Qué tan cierto es esto?
– Luego de la llamada “Revolución del Maidán” en 2014 y del golpe de Estado en Ucrania, comenzaron a tomar protagonismo grupos de extrema derecha y profundamente anti-rusos: se han tirado abajo monumentos que homenajeaban a los héroes y heroínas soviéticos de la segunda guerra mundial, lo cual abreva en el negacionismo del papel del pueblo soviético en la victoria.
Además, se han denunciado ataques a las poblaciones del Donbass por parte de las fuerzas ucranianas y de grupos armados de ultra derecha incorporados a ellas.
Putin sostiene que en 1939 el Pacto de no agresión entre la URSS y la Alemania nazi -en el cual se le hicieron concesiones territoriales para retrasar el ataque hacia la URSS- fue un error y que no quiere repetirlo.
– ¿Cómo es la situación económica de Rusia? ¿Qué pone en juego en este conflicto?
-Rusia es uno de los principales productores mundiales de gas, petróleo y metales, además de armamentos, por supuesto. Por otra parte, hace pocas semanas, profundizó su alianza estratégica con China, lo cual le da una espalda más fuerte para sostener un conflicto.
Rusia se enfrenta a una profundización de las sanciones económicas por parte de Occidente, pero su Ministerio de Economía anunció que en caso de ser desconectada del sistema internacional SWIFT, quienes estarían más perjudicados son los países de Europa que necesitan de ese comercio. También, en ese sentido, les propone un desafío a las potencias occidentales.
– ¿Puede afectar el conflicto la economía argentina?
– Argentina puede verse afectada por un posible aumento de los precios internacionales del gas, ya que tiene una necesidad de importación de este bien; y a su vez, los precios de otros commodities como la soja también comienzan a subir; allí dependerá del margen de maniobra interno del gobierno argentino para manejar las retenciones a la exportación y equilibrar la balanza comercial.
– ¿Cómo fue la relación de Rusia a partir de la caída de la URSS con las repúblicas que la integraban? ¿Por qué hay conflicto con Ucrania y con otras no?
– Rusia durante los años 90 perdió su esfera de influencia internacional y vivió sumida en una profunda crisis económica, social, política y cultural. Durante ese período es que la OTAN avanzó (a pesar de sus promesas a los últimos dirigentes soviéticos de no hacerlo) sobre los países de la ex URSS y del Pacto de Varsovia: los países bálticos, Polonia, Hungría, República Checa entre otros, fueron incorporados a la alianza militar occidental a pesar de haberse terminado la guerra fría y la competencia internacional por esferas de influencia.
Rusia y las actuales Bielorrusia y Ucrania históricamente fueron un territorio unificado en los años del imperio ruso. Kiev fue la capital desde donde el príncipe Vladimir unificó y cristianizó los territorios hace mil años. Es decir, sus raíces culturales e históricas son las mismas; las fronteras actuales tienen que ver con los años de guerra civil post revolución rusa y post segunda guerra mundial, en función de las necesidades de seguridad internacional de esos años.
Las promesas de occidente hacia Ucrania alimentaron los sectores anti-rusos y la negación de la historia y raíces comunes. La posibilidad de ingreso a la OTAN y de establecerse bases militares allí, desata el conflicto.
– La cancillería argentina condenó la escalada en la región y llamó a Rusia a cesar las acciones militares. ¿Esto puede complicar las relaciones diplomáticas con Rusia?
– El viaje de Alberto Fernández a Moscú se dio en pleno desarrollo de este conflicto, hace pocas semanas, y allí expresó que quiere que Argentina sea una puerta de entrada para inversiones rusas en nuestra región en materia científica y energética. Creo que Argentina mantiene en su comunicación una línea correcta de pedir que se resuelvan los conflictos por la vía diplomática. Argentina y Rusia mantienen relaciones diplomáticas hace décadas y en 2015 se firmó una asociación estratégica que se retomó en la actual gestión; me parece que hay que esperar a ver si existirá algún tipo de exigencia por parte de Estados Unidos en función al acuerdo con el FMI y las necesidades económicas argentinas que pueda tener algún tipo de condicionamiento para nuestro país.
– ¿Cómo definirías el vínculo de Putin con el pueblo?
– Tuve la oportunidad de visitar Rusia en dos oportunidades; una de ellas durante los festejos del 70 aniversario del triunfo en la Segunda Guerra Mundial, en Rusia conocida como “Gran Guerra Patriótica”. Lo que puedo decir al respecto es que Rusia en la era Putin comenzó a querer recuperar el terreno internacional perdido luego del colapso de la URSS tanto en términos políticos como así también militares. En este sentido, creo que Putin es valorado por una gran parte del pueblo ruso justamente por recuperar cierto orgullo nacional y volver a poner a Rusia en la esfera internacional desde un lugar propio.
Por Pablo Bassi
Cooperativa de Comunicación Popular Al Margen