Una columna parte hoy por un sendero de montaña y otro grupo buscará llegar desde el lunes por el Camino de Tacuifí, a pesar de la oposición de Hidden Lake, la empresa del empresario inglés rico Joe Lewis, y sus vecinos.
Con las primeras luces del día unas 25 personas partirán este viernes desde la chacra de Warton sobre la costa del Río Azul, El Bolsón, rumbo a Lago Escondido. Son 34 kilómetros de camino de montaña atravesado por ríos y lagos que deberán cruzar a caballo y en kayacs inflables. Acamparán por la noche de hoy y de mañana, y tal vez del domingo, hasta llegar a destino donde se unirán con otras 200 personas que el lunes próximo intentarán salir desde la Ruta 40 a la altura de El Foyel por los 16 kilómetros del llamado Camino de Tacuifí. Intentarán salir, pero no es seguro que logren hacerlo.
En el último intento, hace dos años, un grupo grande de vecinos impidió su ingreso aduciendo que el sendero recorría campos privados como el de la empresa Hidden Lake, propiedad del empresario inglés Joe Lewis. En los últimos meses, cercaron el lugar con tranqueras, cadenas y alambre de púa. Y difundieron una carta dirigida a la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, donde advierten que no están dispuestos nuevamente a ser una población violentada.
Los organizadores de la marcha a Lago Escondido explican, sin embargo, que los violentados aquella vez fueron ellos, y que hay un fallo del Supremo Tribunal de Justicia de Río Negro de 2009 que ordena a la Dirección de Vialidad provincial a garantizar en 120 días la señalización y medidas de seguridad del Camino de Tacuifí. Y que las costas de los lagos son de libre acceso, que Lewis obstaculizó ese sendero y que el camino de montaña no es para cualquiera.
Los organizadores anticiparon que en esta oportunidad realizarán todas las presentaciones judiciales necesarias para garantizar su entrada e integridad física, y que ya pusieron al tanto a la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y al obispado de Bariloche. Ellos son la CTA Autónoma, la CTA de los Trabajadores, la Corriente Federal de los Trabajadores, regionales de la CGT, centros de ex combatientes de Malvinas, organizaciones políticas y la Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua (FIPCA).
Pionero
Julio Urien preside la FIPCA. Es Teniente de Fragata retirado de la Armada. Fue reincorporado en 2005 por Néstor Kirchner, más de 30 años después de haber sido exonerado por sublevarse al dictador Agustín Lanusse en 1972. Quería el regreso de Juan Perón. Y por eso fue encarcelado.
Urien encabezará por sexta vez la marcha a Lago Escondido y le da a Al margen tres razones por las cuales Lewis afronta la soberanía nacional:
1. “Por un lado, hay una irregularidad en la compra de un extranjero como Lewis de 11 mil hectáreas en zona de frontera con Chile. La ley de frontera lo impide, y esa compra la hizo Lewis en términos personales. Varios funcionarios públicos fueron procesados por ello en una causa que prescribió meses atrás”.
2. “Por otro lado, si bien Lago Escondido está dentro de esas hectáreas, él no puede apropiárselo, es público. Allí recibió al ex presidente Obama y a Macri como quiso”.
3. “Tercero, Lewis es un súbdito británico cuyas propiedades pertenecen a la Corona británica y no cumple las leyes argentinas. Las tres o cuatro veces que ingresamos, sufrimos atentados. Es un enclave: Lewis viola la constitución argentina y la de Río Negro, y desconoce un fallo del Supremo Tribunal de Justicia de la provincia. Lewis tiene un aeropuerto sobre el paralelo 42 en el Atlántico y avanza en la adquisición de tierras. Se maneja a su criterio, y la policía le responde. Ahora cuando nosotros vamos con la ley en la mano a ver al jefe de la Policía de Rio Negro, él responde a Lewis. No hay autoridad suficiente”.
En 1994 Lewis creó una sociedad anónima que desarrolló una infraestructura en las 11.285 hectáreas adquiridas, equivalentes al 7% de las tierras de San Carlos de Bariloche. Sobre ellas montó un aeropuerto privado en Bahía Dorada (al que hacía referencia Urien) y un helipuerto comercial en Lago Escondido, y sobre Río Escondido, dos centrales hidroeléctricas que venden la energía al sistema interconectado nacional.
Como detalló Susana Lara en El Cohete a la Luna, sus propiedades le otorgan una accesibilidad de distancias preciadas: 70 kilómetros al aeropuerto internacional de Bariloche; 550 kilómetros al aeropuerto de Bahía Dorada, sin ningún tipo de control de la autoridad aeroportuaria y con acceso directo al océano abierto; y 15 kilómetros a la frontera internacional con Chile.
“Lewis es un empresario que forma parte del poder real, sexta fortuna de Inglaterra, muchas inversiones en la Argentina asociadas a Pampa Energía, Vaca Muerta y fondos de inversión”, dice Urien.
“Con su socio Van Ditmar adquirieron tierras de Pampa del Ludden, una reserva con humedales y mallines que alimenta un valle en la zona de El Bolsón y que va loteando. Tiene mucho poder y condiciona al poder político”, agrega.
Urien recuerda que en la primera marcha a Lago Escondido intervino la jueza Erika Fontela, quien garantizó el ingreso de los caminantes. José Luis Bianco, abogado de Hidden Lake, cuenta Urien, procuró que no perdonaría esa mediación. En marzo pasado, Fontela fue destituida en su cargo.
Proceso
“Son muchos años de lucha que sostenemos para terminar con este enclave extranjero en territorio argentino. El poder político es muy dócil con el poder económico”, dijo en conferencia de prensa Rodolfo Aguiar, secretario general de la CTA Autónoma de Río Negro, una de las organizaciones que convoca a marchar este lunes a Lago Escondido.
“Si en Inglaterra quisiéramos apropiarnos de recursos naturales, nos meten presos. Acá Lewis toma el té con los políticos”, chicaneó el dirigente sindical.
En la causa por el libre acceso a Lago Escondido intervinieron –según datos del equipo jurídico de la CTA- más de 24 jueces de Río Negro, miembros del Superior Tribunal de Justicia, de la Cámara de Apelaciones en lo Civil, Comercial y Minería de Bariloche, del Juzgado Civil, Comercial y de Minería N° 3 de Bariloche, del Juzgado de Primera Instancia del Bolsón, jueces miembros de juzgados de otros fueros y hasta la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
El máximo tribunal de Justicia provincial (el Supremo Tribunal de Justicia) intervino en dos oportunidades: en 2009 instó al Gobierno local a señalizar y asegurar el camino en cuatro meses. Y en 2012, sostuvo que habían transcurrido “33 meses sin que se haya cumplido íntegramente la obligación impuesta en la sentencia (…) y 18 meses desde que quedó firme por la Corte Suprema de Justicia de la Nación”. Además, reiteró que “corresponde asegurar el acceso al Lago Escondido por todas las vías alternativas existentes y pre existentes”. Este fallo también fue confirmado por el máximo tribunal argentino.
Redacción
Cooperativa de comunicación Al margen