Aunque todos sabían lo que iba a pasar, cuando el nuevo camión de reciclaje se abrió paso por el camino de tierra que se bifurca desde la ruta 40 y entró en la Planta de la ARB, la emoción tocó todos los rostros y se tradujo en aplausos.
Bajo un cielo trasparente y brillante, una medialuna de trabajadores y trabajadoras vieron en esa máquina reluciente como se concretaba uno de sus sueños más anhelados, fruto de la organización y la lucha con la que recorrieron todos los caminos.
“Este nuevo camión que llega a la Asociación es muy importante para nosotros, es una herramienta que veníamos pidiendo desde hace muchos años y que hoy se concreta. Es un orgullo, porque todo lo que se ha hecho siempre ha sido a pulmón por cada uno de los que estamos acá”, señaló Gladys Pichiñanco, presidenta de la ARB, y reconoció a los 45 promotores ambientales que se suman al trabajo de la asociación y que saldrán a recolectar lo seco en cada uno de los puntos verdes. “Son muchas las personas que están detrás de esto, las que nos acompañan, las que hicieron posible que el camión finalmente esté acá”, continuó y pidió un minuto de silencio por la partida de LuisBonich, quien falleció este lunes luego de sufrir una descompensación.
Con las llaves en la mano y frente a gran parte de las 58 familias que hoy integran la ARB, Gladys recordó los comienzos de la organización y el largo recorrido desde aquellos días, hace ya 20 años, cuando en pleno 2001 salieron al manto con la urgencia del hambre.
Desde aquel tiempo desolado a la actualidad el camino se fue trazando a fuerza de organización y trabajo mancomunado. Hoy, ese andar constante ya deja huella a las nuevas generaciones. “Todo lo que hemos hecho ha sido con el paso a paso, esto fue un sueño escrito en una pared: vamos a tener un galpón y una camioneta. Hoy estamos muy orgullosos de que nuestros jóvenes se están formando”, continuó Gladys. “Esta es nuestra fuente de trabajo y el futuro, que son nuestros hijos. Nos llena de orgullo, porque esto va a seguir, no va a quedar acá no más. Lo que nosotros iniciamos es muy distinto a lo que ellos van a iniciar. Nosotros empezamos de la nada, algunos no podíamos ni charlar con otra persona porque nuestra personalidad también estaba muy arruinada. Hoy poder expresarnos nos llena de alegría, porque como personas también nos hemos sabido valorar”.
Hacia adelante, dice que esperan poder ampliar la planta y tener una platea para el vidrio. “Detrás de eso hay un montón de trabajo para realizar”.
– ¿De qué forma la comunidad se suma como un eslabón más de todo este engranaje?
-La comunidad siempre nos ayudó en la separación en origen, lo seco por un lado y lo húmedo por el otro. Pero si no le das herramientas, eso es imposible. Hoy tenemos el camión para poner al servicio, recuperar lo seco y hacer la recolección diferenciada. Es importante tomar conciencia, y que cada barrio de la ciudad separe. Manipulamos toda la basura de Bariloche, necesitamos que se separe y la basura llegue en condiciones.
De todas formas, como señala Macarena, abogada del MTE que viene acompañando a la ARB hace ya un año y medio para avanzar con las gestiones y comenzar a concretar pendientes, hace hincapié en un eje central: la recolección diferenciada debe estar en la cabeza del Municipio. “Es importante reforzar eso”, dice sobre uno de los temas a resolver, ya que desde el Municipio de Bariloche no se hace recolección diferenciada, sino que va todo al mismo camión que llega a la planta con la basura mezclada.
“La ARB va a poder gestionar este nuevo camión que hoy se pone a andar para llegar a los grandes generadores de reciclado, a sus propios puntos verdes, para apoyar las jornadas de reciclado que vienen haciendo en el centro cívico desde que se presentó la Ley de Envases, van a poder tener su autonomía. Pero siempre debemos reforzar que la recolección diferenciada tiene que estar en cabeza del Municipio y tiene que ser una política de Estado”.
Fue así que en coordinación con la Federación de Cartoneros, de la cual la ARB forma parte, le presentaron a la directora nacional de Reciclado, María Castillo, integrante de una de las cooperativas de cartoneros del Movimiento de Trabajadores Excluidos. “Ahí se empezó a impulsar el proyecto con la federación y el MTE para que pudieran gestionarlo. Un año y medio después, es una realidad”, dice reforzando la importancia de la articulación.
Por su parte, María Castillo, apunta: “Este tiene que ser el comienzo para que haya más compañeros trabajando, que se integren más actores y de a poquito se vaya transformando la realidad de cada uno de nuestro compañeros y compañeras a lo largo y ancho del país”.
Asimismo, reconoció que tener las herramientas para desarrollar la labor es fundamental y que “estas son las cosas que tiene que hacer el Estado: ver las necesidades y desarrollar políticas para trabajar en condiciones y que la gestión de los residuos se transforme en un hecho. Yo vengo del sector, por eso cuando me siento ya sé que me van a pedir, porque se lo que necesitan, eso hace más fácil la gestión”, dice.
Finalmente, reforzó la necesidad de avanzar con una mesa de trabajo para que este sistema funcione mejor. Como mismo señala una de las integrantes de la ARB la necesidad es “poder mejorar nuestro trabajo, nuestras condiciones y que ya no llegue más lo húmedo a la planta”.
Hoy, ese paso, está un poco más cerca.
Por Violeta Moraga
Cooperativa de Comunicación Popular Al Margen
Seguí informándote en Al Margen: