El miércoles pasado se desarrolló en nuestra ciudad el Foro Consenso Bariloche, espacio político que aglutinó intereses políticos, inmobiliarios y económicos poniendo el foco en los conflictos por los territorios de las comunidades mapuche y tehuelche de esta zona. La periodista Susana Lara que viene investigando estos temas analizó qué dejó este primer encuentro.
– ¿Qué sensación te quedó de lo que se vivió?
-Hay mucho en juego en este Foro, hay un reacomodamiento de los sectores de la derecha en Argentina que han priorizado todo el escenario de la Patagonia con base en Bariloche. Evidentemente esta ciudad tiene los elementos que le permiten hacer esa base, pero con una proyección territorial, de allí que hayan invitado a expositores tanto de la Araucanía para reafirmar la historia oficial como gente de Chubut que es donde también quieren proyectarse.
Hay sectores dominantes, especialmente de los sectores económicos, que no consideran que el sistema institucional le esté dando respuesta a su necesidad de contener el avance territorial de los pueblos originarios. Evidentemente no funcionó la judicialización y criminalización, tampoco son suficientes. Nosotros desde la posición del pueblo podemos pensar que es atroz esa persecución, sin embargo para el poder no es así. Es novedoso que esté articulándose este reacomodamiento de un espacio de derecha no electoral. El Consenso Bariloche para mí no es un partido político, pero si es un espacio político claramente de derecha que supera los intereses sectoriales.
Las sociedades rurales históricamente en la región han confrontado con los pueblos originarios, pero está claro que no alcanza con las sociedades rurales. A su vez, en espacios como Bariloche donde hay un ejido municipal muy extendido donde hay un espacio urbano en el que se han estado reasentando y reformulando territorios comunitarios. Hay familias que históricamente se convivió con ellas como las “viejas familias del lugar”, otra cosa es que esas personas hoy tengan una identidad, un proceso identitario y organizativo, un proceso político. Ahí entran a jugar otros actores. Especialmente cuando esos actores tienen planes económicos sobre esos territorios.
-Pensando en los presentes y ausentes de este Foro ¿Para qué les sirve a los políticos que participaron de este espacio ser parte de una organización que reivindica esos discursos tan bestiales?
-Hay alianzas estratégicas de fondo y hay alianzas coyunturales. En el caso de Arabela Carreras, ella es pata local y a su vez es la gobernadora, es la cara visible de la que confronta con la política de dialogo del gobierno nacional. Esto no lo hace el gobernador Gutiérrez, por ejemplo, que tiene otro modo de conducir el conflicto mapuche. Convengamos que Mascardi hay uno sólo. A su vez en el caso de Chubut, también tuvieron una situación tanto o más grave pero con un gobernador totalmente devaluado y sumergido en un conflicto general a diferencia de Río Negro.
Arabela Carreras es una aliada fundamental de los sectores económicos para cuestionar al INAI (Instituto Nacional de Asuntos Indígenas). Lo que está claro es que cualquiera sea la precisión que tengamos nosotros respecto a la política que está desarrollando el INAI, los sectores del poder rechazan de plano su existencia misma. En esa necesidad de tener una cuña contra un obstáculo para ellos que es la intervención del INAI, la necesitan a Arabela. Y no sólo para eso, la posición de la gobernadora ha sido clave para el estancamiento del conflicto de Villa Mascardi, ha sido la aliada fundamental. Se confirmó eso en el desalojo exprés de la Comunidad Gallardo en El Foyel, quien lo hace posible es la decisión política e institucional de la gobernadora.
Respecto al faltazo de Weretilneck, él tiene un nivel de compromiso con otros proyectos económicos de fondo como pueden ser los capitales de los emiratos árabes que no se pueden tirar por la borda sólo por el conflicto mapuche. Esta es una provincia que tiene deuda en dólares y otro tipo de compromisos. El Senado en Argentina históricamente es una mesa de negociación de otro nivel, con otros intereses. Me parece que la presencia de la gobernadora alcanzaba y sobraba a los fines de una alianza.
Creo que cumplió muy bien su objetivo, la que instala un nuevo conflicto diferente a Mascardi es la gobernadora cuando plantea el caso del Proyecto del Parque Central. Esta cosa fantasma de tantos años que nadie creía que fuera posible imaginarse un parque donde tenés Comunidades muy viejas ya asentadas, Millalonco Ranquehue, la familia Walmes, la Tripay-Antú… ¿Quién puede desconocer esas presencias tan viejas? Cualquiera con un poco de memoria sabe de la presencia ancestral de esas familias. Sin embargo la que plantea el acuerdo con el Consenso Bariloche es la gobernadora poniendo como tema central esto. Evidentemente quieren trasladar el foco de conflicto de Mascardi que ya es un círculo vicioso que no va para ninguna parte, que está estancado. Ella plantea un frente totalmente diferente y lo trae al centro.
Estos son los intereses de todo el vecindario vip que conformó ese Consenso Bariloche. De alguna manera u otra, quienes usan las costas del Lago Moreno y del Lago Nahuel Huapi, los que hacen motocross, mountain bike, expediciones, los que hacen un uso deportivo y económico del espacio son los que se oponen.
Escuchá la entrevista completa:
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Más información: www.tramas.ar
Por Fabián Agosta y Julia Biagioli
Cooperativa de Comunicación Popular Al Margen
