Sigue la puja salarial de los operadores barilochenses. Hasta julio continuarán cobrando el aporte del ministerio de Trabajo. Exigen, no obstante, urgentes soluciones de fondo.
Los cooperativistas del Estacionamiento Medido de Bariloche lograron que el ministerio de Trabajo de la Nación prorrogue un mes más el aporte componente a su salario. De esta manera, en julio cobrarán los $4200 correspondientes a junio, lo que les permitirá alcanzar -junto a los $9000 que surgen de la recaudación del sistema- $13.200 de sueldo.
Eso fue lo que les prometió Ariel Cárdenas, gerente de la Oficina de Empleo y Capacitación regional de la cartera que conduce Jorge Triaca, luego de las medidas de fuerza que incluyeron la toma pacífica de la sede local de Trabajo y varias intimaciones dirigidas a Miguel Ponte, secretario de Empleo de la Nación.
A mediados de abril, el Gobierno dio por finalizado el Programa de Trabajo Autogestionado (PTA) de 18 mil hombres y mujeres de la economía popular en todo el país, incluidos los de las cinco cooperativas que integran en esta ciudad el Sistema de Estacionamiento Medido y Solidario (SEMS).
En aquella oportunidad, Al Margen dio cuenta de la pelea librada por más de 130 personas en Bariloche, que finalizó con el compromiso de extender el PTA al menos sesenta días más.
La eliminación de los programas de empleo se enmarca en la decisión de Cambiemos de trasladarlos a la órbita del ministerio de Desarrollo Social, a través del Salario Social Complementario, equivalente a la mitad del salario mínimo vital y móvil, que a partir de julio será de $5000. Pero los cooperativistas barilochenses se quedaron sin el pan y sin la torta.
Para atenuar el ajuste, el ministerio de Trabajo propuso, en coordinación con el gobierno de Río Negro y el Intendente Gustavo Genusso, reconfigurar el SEMS para que el salario de los cooperativistas se autofinancie. De este modo, prolongó al 15 de julio el análisis del sistema de recaudación cuyo 70% va a los trabajadores, el 26% al municipio y el 4% a la Universidad Nacional de La Plata, por ser la que ideó el soporte tecnológico con la que funciona el sistema.
Lo cierto es que hasta ahora, el SEMS no termina de garantizar el salario de los operadores, que se ubica muy lejos de la canasta básica para una familia tipo en la Patagonia, establecida en alrededor de $21.000.
Entre otras cosas, porque sólo seis de cada diez autos que estacionan pagan la tasa; el importe de $10 por hora -que rigió hasta hace días- quedó congelado ante una inflación que desde 2015 a la fecha superó al 110%; y por las escasas 780 dársenas disponibles.
Por ello, el Concejo Deliberante ordenó semanas atrás que los operadores adviertan que los vehículos en infracción serán sancionados con una deuda municipal aplicable en futuros trámites administrativos; que la hora tenga un valor $20; y que el área de cobertura del SEMS se extienda a la avenida Gallardo.
En diálogo con Al Margen, los cooperativistas asumen su cuota de responsabilidad, pero cargan en el municipio el abandono de hacer cumplir las multas, pintar las aceras alcanzadas por el estacionamiento medido y actualizar el valor de la tarifa.
Anticipan, además, que el centro de sus reclamos es el ministerio de Trabajo de la Nación. Y que si a mitad de julio no hay una salida de fondo, volverán las protestas.
Por Pablo Bassi
Equipo de Comunicación Popular Colectivo al Margen