A 6 años de la sanción de la Ley de Identidad de Género, nos reunimos con integrantes del Consejo Consultivo y Participativo de Diversidad Sexual de nuestra localidad. Balance de los logros de la Ley y las dificultades que quedan por resolverse y la realidad de nuestra localidad.
Las referentes de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina (ATTTA) Luisina, Alex, Roxana y Victoria, actual presidenta del Consejo, nos recibieron junto a la concejala Ana Marks (FPV). Hablamos del derecho al ser, de las discriminaciones que ponen en riesgo las vidas de las personas trans, de la agenda pendiente en materia de políticas públicas, de la importancia de organizarse y seguir visibilizando a la población trans y sus problemáticas cotidianas.
-A 6 años de la sanción de la ley 26743 de Identidad de Género ¿Qué impacto creen que tuvo en la sociedad?
-Alex: Mi transición la empecé después de la sanción de la ley de identidad de género, sabiendo que tenía una ley y que tenía derechos, y pude conocerme después de la ley. Pero es importante visibilizar que antes de la ley estaban mis compañeras, que estuvieron muchísimos años trabajando, poniendo el cuerpo, poniendo su vida, y gracias a ellas logramos la ley de identidad de género. Y hoy, gracias a ellas, yo puedo ser Alex. La sociedad ha cambiado muchísimo. Me cambió la vida saber que hay derechos, organizaciones y compañeras. Estamos teniendo derechos a través de la lucha.
-Victoria: Como activista trans y miembro de una de las organizaciones que fueron precursoras de la ley de identidad de género, siempre digo lo mismo: existimos toda la vida. La población trans siempre existió. Fuimos invisibilizadas, vulneradas, estigmatizadas. Desde el 2012 que tenemos esta ley en nuestro país, gracias a la presidencia de Néstor Kirchner, es importante destacarlo, que nos permitió ser. Existir ya existíamos. Te puedo decir que yo soy Victoria Álvarez Pérez porque así lo acredita mi partida de nacimiento y mi documento. Gracias a una ley de identidad de género. Pero creo que la sociedad sigue siendo la misma. Nos siguen estigmatizando. Sí, hubo cambios, pero el único derecho que hemos adquirido legalmente es este: derecho al ser. Después faltan otros derechos: educación, salud, trabajo, vivienda. No tenemos acceso a otros derechos, todavía. Estamos trabajando y activando para adquirirlos. No pedimos privilegios, no pedimos derechos extraordinarios, pedimos derechos humanos.
-Luisina: Y que no se extienda más porque no podemos esperar más. Esto es de emergencia absoluta. No se puede seguir esperando la aprobación del cupo laboral trans, el derecho a una vivienda, a la educación, a tener un trabajo registrado. No podemos esperar más. Nos estamos muriendo.
-Victoria: En lo que va del año ya hay 38 compañeras muertas en la Argentina. Esto se debe a la falta de políticas públicas que nos permitan a nosotras incluirnos dentro de la sociedad y garantizarnos una mejor calidad de vida.
-Tengo entendido que la expectativa de vida de las personas trans es de entre 35 y 45 años. ¿Se pudo modificar esta realidad?
Victoria: No. Lamentablemente no. De estas 38 personas que fallecieron, todas son menores de 36, salvo una que tenía 64 años. La expectativa sigue siendo la misma.
-Alex: Se destaca que esas muertes son por discriminación. Que fueron asesinadas, y que fueron asesinadas en el sentido de no tener el acceso a la salud que tienen que tener. Las chicas o los chicos trans que hoy acceden a la salud se atienden en el hospital, con las hormonas gratis, con los recursos para sus cirugías que están. Pero antes las compañeras se inyectaban silicona, tomaban mal sus hormonas y por eso todavía no se baja la estadística de la expectativa de vida, porque han hecho procedimientos que no son adecuados. Creo que de acá a unos años más vamos a poder ver cambios porque hoy tenemos la ley de identidad de género que nos brinda la salud, las hormonas y el control médico.
-Victoria: Esto existe en nuestra localidad. Pero no a nivel país. Hay otras localidades en donde los compañeros y las compañeras no pueden acceder a los tratamientos hormonales. A pesar de que tenemos una ley que en el articulo 11 nos garantiza a nosotras y a nosotros los tratamientos hormonales, los cambios corporales, el acceso a la salud integral.
-Alex: Y es una lucha también, porque acá tenemos acompañamiento, personas que militan, que conocen la ley. Y en la Argentina las personas que no tienen ese acompañamiento, no llegan al hospital porque no saben como llegar a existir en el hospital. No saben que pueden ir al INADI si te discriminaron. Y las personas no conocen sus derechos y es nuestra responsabilidad como sociedad llevarles el derecho y la ley. Hay personas que tienen el cambio registral pero no saben la ley entera.
-El 17 de mayo es el día internacional de lucha contra la homofobia, la transfobia y la bifobia. Así es como figura en la efeméride. ¿Pero es correcto que hablemos de fobias?
-Victoria: No, no es correcto porque no es una enfermedad. Adjudicarle una enfermedad a alguien que tiene odio, que discrimina a una persona trans, lesbiana o gay o lo que fuera, por su orientación sexual, no es fobia, es un discriminador. Patologizar a alguien que tiene odio y hace acciones discriminatorias no esta bien. Hoy hablamos de lucha contra la discriminación por la identidad de género y orientación sexual. Creo que ese es el término correcto.
-Ana: La semana pasada, impulsado por el Consejo de Diversidad Sexual, cambiamos por ordenanza el nombre de la efeméride a nivel local. Ahora se llama: Día de lucha contra la discriminación por la Identidad de Género y Orientación Sexual. Ley de Identidad de Género es un desafío, y un primer manual sumamente importante pero desde el cual hay que ir tomando y convirtiendo cada parte en una política pública y en un derecho específico para que se pueda aplicar. Y estas pequeñas modificaciones de normativas, como la que hicimos con la efeméride y como lo que estamos trabajando en relación al cupo laboral trans, son las partes necesarias para que esa ley de identidad de género modifique por completo la vida de las personas trans a través del ejercicio de los derechos reales. Hace falta mucha más legislación, muchas más políticas públicas.
-Y en esa línea, ¿cuál es la agenda del Consejo Consultivo y Participativo de la Diversidad Sexual?
-Victoria: Estamos trabajando en el cupo laboral trans a nivel de la provincia, nuestra adhesión y nuestro celebramiento. Existe hoy un proyecto en la legislatura provincial, presentado por el Frente para la Victoria y Juntos Somos Río Negro.
-Ana: El proyecto a nivel provincial plantea un 2% de vacantes que se habiliten en la planta provincial para personas trans. Plantea además la generación de beneficios impositivos a empresas privadas que contraten personas trans. Es un proyecto que esta en tratamiento en comisión y entiendo que esta atravesando las últimas instancias antes de ser sancionado. Y el proyecto de Bariloche de cupo laboral establece un 4% de vacantes que se habiliten en la planta municipal para personas trans, crea un registro único de aspirantes de personas trans que quieran incorporarse a la planta municipal, y crea un programa de inserción laboral trans para ir acompañado el proceso de inserción laboral. También plantea sensibilizaciones internas al interior del municipio, el estimulo a empresas privadas y una priorización a las empresas que se presenten a las licitaciones públicas que tengan proyectos que contengan propuestas de insertar laboralmente a personas trans. Es un proyecto que estamos trabajando desde el año pasado y estamos esperando que prontamente tenga dictamen de la comisión de desarrollo humano.
– ¿Cómo es la vida cotidiana en Bariloche?
-Luisina: Depende de cada una, de como vive con su identidad. Somos violentadas, discriminadas. Y tenemos que andar en la calle con cuatro ojos. Más nosotras las chicas trans. Es un riesgo que padecemos.
-Alex: También estamos en una ciudad turística. Si vamos al ámbito LGBT, no veo en la mitre una pareja homosexual o lesbiana caminando de la mano. Es duro porque si lo haces te gritan “puto de mierda” y te violentan y te cagan a piñas. Por ahí en Buenos Aires hay una perspectiva un poco más abierta, pero acá es muy difícil.
-Victoria: Bariloche es una ciudad que esta atravesada por el machismo, el patriarcado, y lo clerical. Y eso esta muy a flor de piel en todos los ciudadanos de Bariloche. Entonces obviamente que vamos a ser señalados cuando vamos caminando por la calle. No es fácil participar en espacios políticos, ni participar en espacios de organización, espacios culturales, no es fácil participar. Pero también somos conscientes de que tenemos que visibilizarnos como personas trans. Que tenemos que participar en estos espacios que históricamente fueron negados para la comunidad trans. Sabemos que en algún momento nos van a discriminar, que nos van a burlar, y se van a reír, pero vamos por todos esos espacios.
-Alex: Si nosotros y nosotras no damos el primer pie de ir, tampoco se va a ablandar todo esto. Salimos a lucharla y a romper las barreras culturales.
-Luisina: Es hacer lo que hace todo el mundo: ir al supermercado, al cine, a tomar una cerveza, a fumarte un pucho a la plaza. Cosas cotidianas y que todo el mundo lo hace. Y de hecho yo las hago, todos los días.
-Roxana: Lo que puedo aportar es que todo es cultural. Parte de la educación que se le da a cada individuo. A veces cuando camino en la calle o estoy en un colectivo, ocurren determinadas situaciones, como por ejemplo: estamos en el colectivo y me paro y cedo el asiento a una señora que viene con una nena de 6 o 7 años, y le digo “señora tome el asiento” y la nena le dice “porqué ella es linda y tiene voz de varón”. Es necesario que se hable de esto en las escuelas. Tuve una niñez bastante sufrida porque asistí a clases en los años noventa y prácticamente me colaba en el baño de nenas. Pedía permiso durante clase para poder ir al baño hasta que me descubrieron que iba al baño de las nenas. Hay que visibilizar todo esto a nivel educación, que se visibilicen las personas trans a temprana edad porque ya es notorio el cambio: jugás al elástico, a las muñecas y te querés pintar. Y es importante que haya más aceptación de ese lado, porque las escuelas están totalmente negadas. En mi caso, abandoné mis estudios por discriminación de mis profesores. Me discriminaban los profesores que daban derechos humanos.
-Victoria: Lo bueno es que en estos tiempos ya no contamos con esos códigos contravencionales que nos prohibían salir a la calle. La policía nos llevaba presas por el artículo 55. Hoy esos códigos contravencionales no existen y podemos circular por la sociedad libremente y ser parte de esta sociedad.
-Ana: Los códigos contravencionales se eliminaron después de muchos años de lucha de las compañeras trans. Es un buen ejemplo para pensar como la lucha de las organizaciones transforma y modifican la vida de las personas, porque hoy es otro escenario al de hace 20 años.
Por Florencia Taylor
Equipo de Comunicación Popular Colectivo al Margen