Hoy se cumplen 5 meses del asesinato de Rafael Nahuel a manos del Grupo Albatros de la Prefectura Naval Argentina. Homenaje al Rafa de los pibes y pibas del Semillero en Nahuel Hue, donde forjamos el proyecto de país que los gobiernos neoliberales nos niegan.
En unas semanas se cumplirán 8 años del triple asesinato de Diego, Nino y Sergio a manos de la Policía de Río Negro. En esas tristes jornadas donde una marcha multitudinaria se encolumnó tras la policía para legitimar la muerte de 2 adolescentes y un joven de nuestra ciudad, vimos la terrible fragmentación social que caracteriza a Bariloche.
Esa fragmentación tiene profundas raíces históricas. Mientras no haya un proyecto político emancipador para esta ciudad, seguiremos juntando las piezas de una sociedad profundamente fracturada.
En esas jornadas frías de junio del 2010 los compañeros de Grupo Encuentro abrieron las puertas de la panadería y convocaron a los jóvenes de los barrios a realizar trenzas de pan para regalar durante una de las primeras marchas que exigió justicia por los tres pibes.
No todas las organizaciones sociales tienen panadería, pero si todas trabajan entramando los lazos sociales que la dictadura primero y los gobiernos neoliberales y democráticos, después destrozaron.
De eso se trata. La población que transita por las organizaciones es la excluida por la economía de mercado y el cuento del derrame, que nunca llegará hasta el Alto profundo de Bariloche.
Los excluidos en esta ciudad (como el Rafa) mayoritariamente provienen de los pueblos originarios, se reconozcan o no. Vienen de la tierra, del barro y desde el fondo de la historia.
Hoy se cumplen 5 meses sin Rafa Nahuel. Su sonrisa ya no nos acompaña a la hora del mate. Ni al caer la tarde, las tortas fritas que amasaba antes de irse. Ya nadie se animó a terminar el trarilonco que quedó en el telar esperando otras manos. Y las semillas que soñó convertidas en verdura pasaran otra temporada sin germinar…
Hoy, con el piberío que se planta en el reclamo de justicia por Rafa. Con los familiares que conviven con el dolor de la ausencia. Con la comunidad y el barrio que lo vio crecer y caminar al Rafita, vamos a elaborar trenzas de pan (como en aquel frío junio) y las compartiremos para sentirnos fuertes y unidos en la lucha por justicia. Porque entendemos que ese, es el camino, y que ninguna bala podrá detener la fuerza de la organización popular ni el proyecto de ciudad y de país que soñamos.
Entonces; mientras esperamos a que la Justicia dé los nombres de los Albatros que dispararon. Mientras exigimos que quienes dieron las ordenes, a quienes dispararon, sean condenados. Y que los responsables políticos de disparar 114 balas de guerra por la espalda contra un pibe indefenso paguen por lo que hicieron.
Mientras todo eso sucede. Nos acobachamos en la organización que nos hace fuertes y con nuestras manos trenzaremos pan y lo compartiremos con el pueblo profundo de Bariloche que siente cada muerto como propio y sueña con un destino de justicia y felicidad…
Por Alejandro Palmas
Equipo de Comunicación Popular Colectivo al Margen