El Ministro de Ciencia y tecnología Lino Barañao justificó el recorte en su área argumentando que “hay demasiada pobreza en la argentina para aumentar la cantidad de científicos”. Los científicos y universitarios autoconvocados de Bariloche desmenuzan cuales son las verdaderas razones del ajuste en el sector de ciencia y tecnología.
Ante las recientes y polémicas declaraciones del Ministro de Ciencia y Técnica de la Nación Dr. Lino Barañao, y del Presidente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Dr. Alejandro Ceccatto; los Científicos y Universitarios Autoconvocados de Bariloche manifiestan lo siguiente:
Consideramos muy grave que las máximas autoridades del Ministerio de Ciencia y Tecnología y del CONICET justifiquen el ajuste en Ciencia y Técnica mediante el argumento de que “hay demasiada pobreza en la Argentina para aumentar la cantidad de científicos en el CONICET” y dejen a cientos de compañeras y compañeros aspirantes a la carrera de investigador científico en la calle. Sin eufemismos: despedidos.
Parafraseando al premio Nobel Bernardo Houssay: “Los países ricos lo son porque dedican dinero al desarrollo científico-tecnológico, y los países pobres lo siguen siendo porque no lo hacen. La ciencia no es cara, cara es la ignorancia”. Desde este punto de vista, es imposible salir de la pobreza y generar trabajo digno y de calidad sin inversión en educación, ciencia y tecnología. Sin embargo, hoy nos encontramos ante una burda maniobra de interrupción y retracción de políticas científico-tecnológicas a través del ajuste y el desfinanciamiento. Pero no sólo se desfinancia al sistema público de ciencia y tecnología, sino que se justifica dicho desfinanciamiento en el marco de políticas ejecutadas por el gobierno de Cambiemos que han implicado la transferencia de una enorme riqueza desde los trabajadores y las pequeñas empresas hacia los sectores más concentrados de la economía, como en el caso del sector financiero, la megaminería, los agroexportadores, la fuga de capitales, la condonación de deudas a las grandes fortunas, por dar algunos pocos ejemplos. Ante este panorama, cabe denunciar los dichos falaces y contradictorios de las autoridades del Ministerio de Ciencia y Tecnología y del CONICET y enfatizar que el aumento de la riqueza entregada a estos sectores supera muchas veces el presupuesto para Ciencia, Tecnología y Universidad.
El ajuste actual del CONICET es del 60 %, y está avalado por los mismos que elaboraron e impulsaron el Plan Argentina Innovadora 2020, puesto en marcha en el año 2012. Sin embargo, Barañao y Ceccatto, como bien dice el experto en historia de la ciencia Diego Hurtado, “reconvertidos en fervientes macristas y en pesada herencia de sí mismos” ahora afirman que el crecimiento (más democrático) de los últimos años del Consejo y con la mentada proyección hacia el 2020 es “inviable”. En este punto, también denunciamos la mentira acerca de que en 2015 “hubo un ingreso masivo y con ningún criterio” a la carrera de investigador, y que “el promedio de ingresos es de 600 a 700 investigadores por año.
Argentina innovadora 2020
El criterio de crecimiento del CONICET es el Plan Argentina Innovadora 2020. Por eso, cabe recordar que se trata de un proyecto en el cual se propone llegar al 2020 con 5 investigadores por cada 1.000 miembros de la Población Económicamente Activa (PEA), número similar al de los países desarrollados. Según el Banco Mundial, en 2014 la PEA de la Argentina era aproximadamente de 20 millones, el 5 por 1.000 representaría aproximadamente 100.000 investigadores. Pero más allá del número preciso, creemos que la cantidad de ingresantes a CONICET debe determinarse en función de un proyecto serio, que atienda al desarrollo de un país igualitario. Por eso consideramos de suma gravedad que nuestras autoridades avalen el ajuste, y que el número de ingresantes a la carrera de investigador se defina en función de un presupuesto sumamente perjudicial para el sector. Asimismo, reivindicamos el proceso de evaluación para ingresar a la carrera de investigador del CONICET; proceso que conlleva un arduo trabajo de evaluación de candidatos, y la posterior evaluación por parte de comisiones ad-hoc.
Aunque las autoridades nacionales pretendan ningunearnos como interlocutores, la comunidad científica de Bariloche y del país les exige que defiendan nuestro trabajo como becarios e investigadores; lo que supone, en vez de justificar el ajuste, y de acompañar un proyecto restaurador de derecha que desarticula políticas consensuadas en democracia, conseguir el presupuesto necesario para el desarrollo del sector.
No obstante, somos conscientes de que el recorte en el CONICET es el símbolo del proceso de destrucción de la industrialización de la Argentina. Proceso que va de la mano de la apertura indiscriminada de las importaciones y de la batería de medidas económico-políticas que tanto están perjudicando a las pequeñas empresas y destruyendo las posibilidades de soberanía. En este sentido, afirmamos que el recorte en el CONICET trasciende lo meramente sectorial y ratificamos nuestro compromiso social.
No al ajuste en ciencia
Por todo lo anterior, rechazamos los dichos de Barañao y de Ceccatto y convocamos hoy miércoles 14 de diciembre a las 16hs al CCT-Patagonia Norte (Pioneros 2300) para manifestarnos en contra del recorte presupuestario en el CONICET, que dejará a cientos de compañeras y compañeros postulantes a la carrera de investigador científico en la calle, como así también del recorte en subsidios para la investigación que impactará en los equipos de trabajo. Realizaremos mesas de discusión en torno a los discursos que vinculan el sistema público científico, la pobreza y el desarrollo científico y educativo en el país.
Invitamos a participar a todas y todos los colegas investigadores, docentes, becarios, técnicos y estudiantes, y a la comunidad de Bariloche para decir NO al Ajuste en Ciencia, Tecnología y Universidad.
Por Científicxs y Universitarixs Autoconvocadxs de Bariloche
Para Equipo de comunicación Popular Colectivo al Margen