Conmovedor relato de una mamá, mapuche, que emocionó en el Concejo Deliberante cuando fundamentó el pedido de declaración para que sea legal el uso medicinal de la marihuana. Laura guanca Huenulaf integra el grupo de padres de personas con TEA (trastornos del espectro autista). Dialogamos con ella.
Para el acompañamiento de su hijo llegó a contactarse con y conseguir cremas y aceite de cannabis y nos confía que aporta mejoras muy significativas en la calidad de vida de su hijo. Describe también cómo se fue articulando una red de contactos con personas con situaciones parecidas que van aprendiendo colectivamente. Laura nos cuenta también la raíz espiritual de su camino: en la rogativa de este año, pedí medicina para mi hijo, dice.
Hay una cuenta de Face para compartir experiencias e información: Pacientes y cultivadores de Viedma y Patagones